Lo del titulo,,,

Supongo que toda época en la vida de las personas ( pensantes) tiene momentos buenos y momentos malos ( y momentos peores que los malos), pues bien en este que creo que debe ser uno de los peores de mi vida he decidido dejar en este blog mis reflexiones.
Se puede vivir muchos años, o toda la vida sin tener que detenerse a pensar acerca del significado de las palabras, pero llegan ocasiones ( y no llegan solas, sino que las provocamos)en que la sutil diferencia entre el significado de una palabra y otra puede ser la diferencia entre ser comprendido y no serlo.Pero veamos como puede darse eso: si una persona conoce el significado de una palabra y su interlocutor conoce tambien el significado de esa palabra pero está equivocada,la comunicacion se vera entorpecida, sino impedida, porque ambos usaran dicho tèrmino pero con intenciones distintas; Cómo puede haber comunicación en esos términos?, la conclusión obvia es: bien, que uno informe al otro de su error...Pero para eso una de las partes debe darse cuenta que la otra está equivocada.
Si ambas partes siguen intentando comunicarse sin aclararlo ( y no por falta de ganas)lo que sucederá inevitablemente es que los malentendidos sigan creciendo, por lo cual el efecto del diálogo será precisamente lo contrario de lo que se esperaba.
Más interesante aun, es cuando se usan palabras cuyo significado es ambigüo pues suele ser cansador no sólo tratar de decir algo sino que ha de sumársele a ello la tarea de acordar cual acepción ha de usarse o cual será la forma en que se interpretará...todo esto en bien del entendimiento, no es irónico?